martes, 6 de diciembre de 2011

6 place Saint-Germain-des-Prés

00010203
fotografías a cargo de Karina Beltrán
texto a cargo de Dara Scully
vida creada para Olalla Pérez


Alguien habla de la carne, del café caliente al otro lado de la calle, del rugido ensordecedor de una ciudad muda. Alguien habla de todo eso, de lo que falta por decir y de lo que ha dicho de más a lo largo de su vida. Y, sin embargo, ese silencio. Prieto bajo la falda, sobre las costuras de la tela, rozando levemente su piel como una caricia. Ese silencio, el del libro entre las manos. Blando y amable, como suelen ser los silencios que enternecen las entrañas.

Lee en el Café de Flore. Se bebe con los ojos cada letra, las pupilas abiertas, la respiración a medio cocinar. Lee en ese París pasado por agua, brillante de ganas, tenue bajo la luz de un sol que se resiste a salir. En medio del murmullo, de todo lo que tanto le gusta algunas veces, cuando sus ojos buscan los de otros y colisionan para después perderse entre la bruma.
Así lee la muchacha, a destiempo, atenta a todo cuanto sucede a su alrededor y, sin embargo, con el café frío sobre la mesa. ¿Y qué lee? Nos preguntamos. ¿Qué lee con sus anteojos, con el cabello remetido detrás de las orejas, con la nariz olfateando y los dedos, esos dedos, sus dedos largos de pianista, prensando el papel hasta dejar huella? Supongo que la vida de otro. La vida de otro en París, la de más allá, la del hombre del vino y la de las campanas de la iglesia de Saint-Germain-des-Prés. La vida del que está por venir, del que traerá con él el verano y el amor, ese amor cálido que se intuye en el aire, que flota acariciando su nuca.

Esa vida lee la muchacha, sin saberlo, sin imaginarse que más pronto que tarde dejará el libro sobre la mesa para levantar los ojos y decir hola, qué tal, para tocar, con esos dedos suyos, lo que hasta hace solo un momento era tinta sobre el papel.

4 comentarios:

sonia marpez dijo...

un mirar bello y delicado.

Sofi Mar dijo...

De acuerdo con Sonia, un muy delicado mirar. Me encantó "...tenue bajo la luz de un sol que se resiste a salir." Sé me quedó en la mente.

Abrazos, Sofie.

Alulae dijo...

.gracias, es precioso, me ha emocionado y refleja una parte romántica de mí, que sueña y mantiene la esperanza, en estos días y en estas épocas.

.tengo un blog, donde os he citado (espero haberlo hecho bien, soy nueva en el mundo blogger!)Aquí lo podéis ver: http://alulaeparis.blogspot.com/

.Cómo veréis, Paris está presente!

Gracias y enhorabuena por un blog precioso y delicado.

Olalla

Régulo Hernández dijo...

"Mi lenguaje tiembla de deseo" puede leerse en una de estas delicadas (como siempre) imágenes de Karina Beltrán. Gracias por estas delicadezas.
Régulo

Publicar un comentario